lunes, 25 de abril de 2016

Renacer


A veces lo olvidas todo. Olvidas comer y caminar, olvidas las calles y los nombres, los rostros asociados a los mismos se desdibujan lentamente. No recuerdas cómo se buscan los números de teléfono en la agenda y no recuerdas tu DNI, ese documento imprescindible. No sientes de la misma forma, y el mundo se percibe distinto.

Entonces, comienzas de nuevo... Vuelves a ser... Recuperas el yo...

De nuevo, la rutina...