martes, 2 de septiembre de 2014

Tras Cincuenta sombras de Grey

Cada uno dedica su verano a lo que buenamente puede, sin embargo, entre viajes y búsquedas, para mí agosto es el mes del Best-seller. Cada verano leo las novelas más vendidas de los últimos años y este, tras mucho resistirme, me he decantado por Grey y sus perversiones y confieso, que pese a no tener una gran calidad literaria,cumple su objetivo: NO PODER DEJAR DE LEERLO. Pero una vez acabado, hay algo que me inquieta y en lo que no dejo de pensar. ¿Por qué les encanta este libro a las mujeres? Creo que es por la historia de amor y por la salvación. A fin de cuentas, simbólicamente cada libro corresponde a varias fases: la oscuridad, la redención y la salvación. Tal vez sea esto por lo que las mujeres leemos el libro. Ahora, lo que me preocupa es la influencia que puede llegar a tener en las mujeres jóvenes y lo que puede suponer. No considero que un hombre como el de la novela sea romántico. Pero este tipo de ficción puede deformar la visión de la realidad y en un mundo en el que las mujeres nos pasamos la vida reivindicando nuestra igualdad y condenando la violencia de género y el machismo que tanto tiempo llevamos combatiendo y que proviene de la tradición. Al leer la novela, me quedo con esta preocupación social y es que muchas chicas piensen que sea un ideal. Con esto no quiero condenar el libro, para nada. Considero que es una novela entretenida y adictiva, el best-seller de la novela erótica. Tal vez sea deformación profesional, pero es algo con lo que me he quedado del libro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Adelante, no seas tímido...